El Salamanca no aguanta con uno menos y acaba cediendo ante el Bergantiños (2-1)

El Salamanca UDS murió en la orilla. Otra vez. Cuando ya saboreaba el empate tras resistir con diez más de una hora, un córner en el minuto 92 terminó en tragedia. Kensly remató sin oposición en el área y castigó a un equipo que sigue sin aprender la lección a balón parado.

Los de Dueñas saltaron al campo con Jon en portería; Parra, Cantero, Murua y Souley en defensa; Amaro y Curro en el centro, este último en lugar del sancionado Cristeto; Loren, Galván y Juancho por delante y Emaná en punta. La primera media hora fue pareja, con pocas ocasiones y un ida y vuelta sin claridad en las áreas. Currás inquietó a Jon con un disparo cruzado, mientras que Galván probó desde fuera, pero sin premio.

Sin embargo, todo se torció en el 33'. El mexicano se encendió al protestar un penalti inexistente y el árbitro, sin dudarlo, le mostró la segunda amarilla. Una hora con diez por delante y un Salamanca UDS condenado a remar. Encima, en el 40', Currás firmó el 1-0 tras una buena jugada por la izquierda. Al descanso, la situación ya pintaba negra.

Tras el paso por vestuarios, Dueñas reaccionó. Quitó a Loren para meter a Álvarito, y poco después, el técnico también acabó expulsado por protestar. Pero el plan funcionó: en el 60', Emaná bajó un balón en el área -con posible mano incluida- y Álvarito fusiló a Canedo para el 1-1. Volvía la esperanza.

El Salamanca UDS se aferró al empate con un Jon en estado de gracia. Sacó una vaselina casi sobre la línea, detuvo un disparo a bocajarro y desquició a Kensly en un par de ocasiones más. Todo apuntaba a que los charros se llevarían un punto trabajado... hasta el fatídico minuto 92. Córner al área, Murua pierde la marca, Jon sale en falso y Kensly solo tiene que empujarla. Gol. Derrota. Otra vez.