Tarde sobresaliente para Miguel Ángel Perera que salió por la puerta grande en el segundo día de toros en La Glorieta

La Glorieta acogió este Domingo la primera corrida de toros de la Feria taurina Virgen de la Vega 2023 en el que es el segundo festejo del abono de la Feria de Salamanca. En esta ocasión, se dieron cita los toreros Miguel Ángel Perera, Leo Valadez y Manuel Diosleguarde, que lidiaron toros de la ganadería de Vellosino. Esta ganadería, es propiedad de los Hermanos Núñez Elvira. Pastan en la finca "Vellosino", En Villaseco de los Reyes (Salamanca), esta, será su sexta participación en el ruedo de La Glorieta desde que debutara en 2005.

El tiempo sobre el coso de Salamanca al empezar la corrida fue de 26 grados, mayormente nublado y con cierto nivel de humedad que creaba un ambiente cargado. 

Tras el sorteo de esta mañana, los toros que saldrán a la lidia serán estos seis y serán por este orden: 

1º- Españolito, número 20, negro mulato bociclaro, de Mayo de 2009 y 582 kilos de peso.

2º- Aguilillo, número 44, castaño, de Mayo de 2018 y 576 kilos de peso. 

3º-Aguilillo, número 1, negro mulato, de Agosto de 2019 y 616 kilos de peso. 

4º- Madrileño, número 107, colorado, de Noviembre de 2017 y 617 kilos de peso.

5º- Españolito, número 113, negro salpicado, de Octubre de 2017 y 603 kilos de peso. 

6º- Inclusero, número 40, negro listón chorreado en morcillo, de Abril de 2019 y 581 kilos de peso. 

Arrancó así la primera actuación de la tarde de la mano de Miguel Ángel Perera en la que será hoy su decimocarta actuación siendo la primera en 2005, desde entonces, ha logrado llevarse 18 orejas de los 24 toros que ha lidiado consiguiendo dobletes en 2008 y 2009 y saliendo en hombros en seis de esas actuaciones. En 2015 sufrió aquí una de las cornadas más duras de su carrera cuando el toro le corneó en el estómago y lo envió al callejón. con esta premisa, llegó el primer toro, Españolito, con buena presencia y ovación nada más salir al ruedo. Pese a que le costó arrancar y no tenía un estilo bastante fino, Perera supo como dominarlo y saco el máximo partido al toro con movimientos muy inteligentes y milimétricos, lo finiquitó con un descabello tras no estar fino en la estocada y finalmente se ganó la primera oreja de la tarde. 

El segundo en salir a torear, fue Leo Valadez, tercera actuación en esta plaza para el mexicano que debutó el año pasado, le tocó enfrentarse a Aguiliño, un toro al que le costó no solo salir a escena, sino además entrar al paño con el joven torero que poco pudo hacer para arreglar la faena, pese al buen arranque con el caballo, mala faena que acabó con un pinchazo y estocada baja delantera para poner punto final a una lidia sin pena ni gloria. 

El tercero de los toreros, Manuel Diosleguarde, siempre querido torero charro, debutaba como matador de toros en esta plaza en la que ya deslumbró como novillero antaño. En frente, Aguilillo, un toro recio, idóneo para que Diolegurde le brindara a La Glorieta una buena faena con gran firmeza y aplomo, finalmente, el salamantino consiguió sacar gracias a su madurez e inteligencia una más que merecida oreja llegando así al ecuador del acto. 

La segunda tanda de toros, la inaguró nuevamente Miguel Ángel Perera, contra un toro de nombre Madrileño que salió con gran fiereza a la plaza estillándose un cuerno tras la primera embestida al buladero, gran ovación se llevó del respetable este toro que de principio a fin presentó batalla de forma soberbia y poderosa. Protagonizando un buen empujón al caballo primero y un gran tercio de banderas después, la batalla final fue una auténtica delicatesen por parte de ambos contendientes, finalmente y tras semejante actuación, el público pidió, sin éxito, un indulto merecido al animal. No se consiguió, pero Perera sacó dos orejas y Madrileño se ganó el honor de una vuelta al ruedo para poner fin a la actuación entre ambos. 

No tuvo suerte tampoco Leo Valadez en su segunda lidia, en frente un toro de poco fiar, sin nobleza y con peligro, se convirtió en una lucha sin demasiada emoción más allá que algun susto por las embestias en falso del astado, todo le fue mal al mexicano que no acertó tampoco a la hora de matar teniendo que llevar a cabo dos pinchazos para que finalmente el animal, se tumbara por su propia naturaleza, silencio al final del duelo para un torero que no disfrutó de una buena tarde en Salamanca. 

Cerró la tarde Diosleguarde,  en una función un tanto polémica por el final de la misma. Tras una lidia sin complicaciones ante un toro noble  que ofreció un buen espectáculo, el propio animal cayó al suelo de forma fulminante tras un último tercio excepcional por parte del joven torero salmantino. Poco más pudo hacer quedando el astado tendido sobre el suelo incapacitando el fin de la faena y el consiguiente premio que quedó en nada. Supo a poco este toro ya que pidió un sobrero el respetable que se marchó a casa con ganas de haber visto al torero de su casa subido a hombros.